Sigueme

Síguenos en Twitter

martes, 30 de septiembre de 2014

Restaurantes en Helsinki con las tres ¨ B ¨.

Comer y beber en Finlandia es caro. Muy caro. Punto.
Asumiendo esto se pueden encontrar lugares asequibles en lo que a comida se refiere porque el alcohol es algo prohibitivo. La cerveza ronda los 6-7 euros la pinta y una copa de vino tinto entre 9-12 euros, copa que suelen llenar hasta arriba, no como en España que ponen menos de la mitad.

Pero ahora me centraré en la comida. Si sois como nosotros, la gastronomía es una de las piedras angulares en nuestros viajes. Buscamos frecuentar los sitios donde van los oriundos, probar cosas nuevas, conocer los platos típicos; no nos hacemos 2000 kilómetros para comer en un Burguer King o tomar una pizza, para eso ya nos quedamos en casa.

En Helsinki la cosa se complicaba, una ciudad con buena oferta gastronómica pero donde el precio medio de un plato son veinte euros y un postre diez. Por una botella de vino te cobran a partir de 45 euros...¡uuufff! Ya me imaginaba comiendo bocadillos a diario.

Después de una exhaustiva investigación por internet en foros, blogs y algún que otro consejo de un nativo de Helsinki, encontré un par de sitios mas que interesantes y que paso a contaros.

KuuKuu, situado en el barrio de nuestro apartamento, a tiro de piedra de la iglesia de roca. Como podéis ver en su web es un sitio con una decoración tirando a modernilla, con unos camareros muy serviciales e incluso uno de ellos hablaba español. Fuimos dos veces, una a comer y otra a cenar.
La cena consistió en un entrante delicioso de pescado blanco ahumado ( 11 euros ) para compartir y de segundo pedimos las típicas albóndigas finlandesas con puré de patata y salsa de frutos rojos ( 18 euros y ¡nada que ver con las de Ikea! ) no pedimos postre porque nos pareció caro y porque estábamos llenos, yo hasta me deje una albóndiga y eso que soy de buen comer. Para beber dos pintas de cerveza Karhu ( 6.5 euros)

Cerveza Karhu
Albondigas finlandesas.


Nos fijamos en que la gente no suele pedir entrante y es que el tamaño de los platos es muy respetable.
En Finlandia para comer tienen algo parecido a nuestro menú del día, lounas se llama allí. Precios mas baratos y platos diferentes a la carta, en KuuKuu comimos un día un plato con carne, patatas y remolacha bastante bueno.

Salve, al lado del mar y abierto desde 1897. Un lugar que parece una taberna de marineros por su decoración. De precio mas o menos como el KuuKuu, tomamos una sopa de salmón para compartir, arenques fritos y el seaside mix que es un plato de salmon ahumado, atún, gambas, cebollas, trocillos de patata cocida y eneldo, en un cuenco viene una yema de huevo; el camarero nos explico que había que abrir un hueco en los ingredientes del plato, poner la yema y volver a taparlo, contar diez segundo, revolverlo y comer....solo puedo decir que estaba delicioso. 
En el precio de los platos iba incluido un buffet de ensaladas.
No tengo fotos de la comida pero las raciones son gigantes.

Kauppatori, la plaza del mercado. No es un restaurante pero hay multitud de puestecillos de comida típica finlandesa. Tomamos estofado de reno con puré de patata y salsa de frutos rojos (unos 11 euros) y una salchichas con puré y verduras ( 10 euros ). El mercado esta muy bien, sus puestos de frutas, en la época que estuvimos, eran una explosión de color. Imprescindible.

Estofado de reno y plato con salchichas.


Story, dentro del antiguo mercado cubierto. Comida nórdica con toques modernillos ( otra vez, raciones enormes ) fuimos a mediodía y los platos rondaban los 12/17 euros. Tomamos una sopa de salmón y un plato de salmón en salsa con verduras. 

Varias cosas que nos gustaron y que eran comunes en todos, nada mas sentarte te ponen una jarra de agua, no hay que andar mendigando con el agua como en España donde parece que esta mal visto pedirla del grifo.
En las mesas tienen una pequeña montaña de servilletas y un cubilete lleno de cuchillos, tenedores y cucharas. Muy practico todo.

De los sitios donde estuvimos, estos son los mas reseñables por su comida rica y sobre todo su precio, aunque en cualquiera de estos si pides alcohol la cuenta subirá considerablemente.

¿Cuales son vuestros sitios favoritos en Helsinki? ¿Habeis estado en alguno de estos?.


lunes, 22 de septiembre de 2014

Nuestro apartamento en Helsinki.

Hace ya tiempo que por motivos económicos, cuando vamos de viaje nos alojamos en un apartamento. El ahorro es enorme y además te da la libertad de disponer de mas espacio y una cocina. Una de las cosas que más nos gustan cuando estamos fuera es ir a un supermercado, creo que es un lugar donde se pueden ver muchas de las características de los habitantes de cualquier sitio; así que cuando estamos ya muy cansados y solo con ganas de picar algo viene muy bien haber comprado algo y tomartelo tranquilamente en tu apartamento.

La web que usamos siempre es Airbnb, la conocí cuando planeaba el viaje a Nueva York y ví lo carisimos que son allí los hoteles. Es facil de usar y ofrece mucha confianza ya que las opiniones de cada alojamiento solo son de viajeros que han estado, no es como Tripadvisor que puedes escribir de lo que quieras sin nada que verifique que realmente has estado.

Así que para el viaje a Helsinki hicimos lo mismo; esta vez la oferta era mas limitada ya que lo decidimos con poco tiempo de antelación y muchos apartamentos estaban ocupados, pero al final dimos con uno que tenia muy buena pinta. Una de las cosas que más valoro a la hora de reservar un apartamento es que el dueño responda rapidamente y en este caso Mikko, que así se llama, cumplió perfectamente.
El apartamento está situado en el barrio de Etu-Töölöö, a escasos 300 metros de la Temppeliaukio Kirkko o la iglesia que está excavada en la roca. Es un lugar muy tranquilo, con supermercado, farmacia y restaurantes a tiro de piedra, a pocos minutos caminando de Kamppi y con un pub muy bueno justo abajo. Me pareció muy bien situado, de hecho no usamos el transporte publico salvo para ir a Seurasaari y a la terminal del ferry de Tallinn, todo lo demás lo hicimos andando.


Y ahora viene lo mas interesante, ¿como era este apartamento nordico? ¿estaba limpio? ¿bien equipado?. Puedo decir que fue un acierto.
Consta de dormitorio, baño,cocina y salón todo decorado con ese estilo escandinavo tan luminoso y sencillo que gusta a todos.
Mikko fue el perfecto anfitrión, no hubo ningún problema con nuestra hora de llegada, nos estaba esperando para enseñarnoslo todo. Un detalle que nos encanta es que tienen la costumbre de descalzarse en cuanto entran a casa, nosotros ya lo sabiamos y fue lo primero que hicimos al subir, de hecho el estaba en zapatillas de estar en casa. Nos habia dejado el frigorifico con zumos, refrescos, agua, vino (¡con lo caro que es el alcohol allí!) y unas chocolatinas; la cocina tenia todo el equipamiento necesario e incluso cafe, té, azucar, aceite,sal, especias, etc. Como dato curioso, mencionar que vajilla y vasos eran de marcas de diseño finlandés como Arabia o Iittala.

En el baño igual, una cesta con gel, champú, loción corporal, bastoncitos. Todo con mucho detalle. Todo inmaculadamente limpio.

En el salón había un sofá de buen tamaño, tele con pantalla plana y una mesita con guias y mapas de la ciudad

El dormitorio igual de cuidado, con una enorme cama de 1.80 cm que parecía (y era) comodisima

Como mejor se ve todo esto es con fotos, así que aquí estan.

Salón

Otra vista del salón.
Cocina (con frigorifico enorme)
Baño
Dormitorio (perdón por la maletas jejej)
Como podeis ver, un apartamento amplio, luminoso y muy cuidado.
Quería comentar ahora el tema del baño en Finlandia, no sé si todos seran así, al menos la mayoria de los que se alquilan en Airbnb si, así que supongo que sera bastante común. Si os fijais en la foto, no hay bañera ni plato de ducha, justo en la entrada (no se ve en la foto) había una alfombrilla de tablas de madera la cual antes de ducharte la enrrollabas para que no se mojara, el suelo es de un material que no resbala y justo al lado tienen un cepillo de goma parecido a los de limpiar cristales, así que te duchabas sin cortina ni nada ( obviamente mientras te estas duchando nadie puede entrar al baño a nada ), terminabas, pasabas el cepillo para eliminar restos de agua, extendias la alfombra de madera para poner los pies en una superficie seca y listo. Creo que este es el mismo sistema que hay en hospitales y residencias de ancianos.
He de decir que me pareció muy comodo y practico, perfecto para ahorrar espacio.
Ya habeis visto el apartamento, a nosotros nos encantó :)
¿Que os parece? ¿Que preferís en vuestros viajes? ¿Hotel o apartamento?
 
 
 






martes, 16 de septiembre de 2014

Korvapuusti o como acercar Finlandia a tu cocina.

Hoy traigo al blog una receta buenisima, los korvapuusti o bollitos de canela. Si vais a Finlandia no podéis dejar de probarlos, es un acompañamiento típico del café y los venden en prácticamente cualquier sitio.
Yo soy muy fan de la canela y las especias así que estaba deseando comerlos y no me decepcionaron.

Hay muchas recetas por la web pero realmente ninguna me terminaba de convencer, así que he creado la mía propia basándome en esta y esta otra .

Así que, encended el horno y poneos los delantales que ahí va la lista de ingredientes:

  • Una cucharadita de cardamomo molido.
  • 40 gr. de levadura fresca.
  • 200 gr. de azúcar blanquilla
  • 100 gr. de mantequilla a temperatura ambiente + tres cucharaditas para el relleno
  • 2 huevos.
  • 1/2 litro de leche
  • 2 cucharaditas de canela
  • 1 kg. de harina.
  • Azúcar perlada para decorar.
Lo primero de todo será moler el cardamomo. No suelen venderlo ya molido (al menos yo no lo he visto) y de todas formas merece la pena el trabajo extra ya que la intensidad de aroma de unas semillas recién molidas es incomparable.


 Estas son las vainas, hay que abrirlas y sacar las semillas. Las machacamos lo maximo posible. Reservamos.

Templamos un poquito la leche, sin que llegue a quemar, solo que este tibia, y deshacemos la levadura.
Añadimos el azucar, los cien gramos de mantequilla,el cardamomo molido y uno de los huevos.

Ahora toca remover esta mezcla, podeis usar batidora aunque yo lo hice con una cuchara de madera.
Vamos añadiendo harina gradualmente y sin dejar de remover, al principio os quedara algo parecido a esto que como podeis ver esta muy liquido.

Así que hay que seguir añadiendo harina para que vaya congiendo consistencia.
La masa tiene que quedar suelta y esponjosa, sin quedar adherida a los dedos o a las paredes del cuenco.
En otro cuenco que hayamos engrasado previamente ponemos la masa y la tapamos con un paño de cocina, si teneis tiempo podeis dejar que suba de forma natural dejandola en un sitio templado durante 45 minutos o asi, si sois tan impacientes como yo, se puede meter en el horno a 50ºc hasta que doble su tamaño.

Ahora hay que extender la masa, asi que ponemos en la encimera un poco de harina y la extendemos formando un rectangulo.

Dentro de este rectangulo añadiremos el relleno, para el cual en cuenco podremos tres cucharadas de mantequilla derretida, dos cucharaditas de canela y tres cucharaditas de azucar, removemos bien y con un ayuda de un pincel cubrimos toda la superficie.
Cuando este cubierto, lo enrrollamos como si fuese un brazo de gitano.










 Una vez enrrollado vamos cortando porciones en forma de trinagulo tal que asi.



Hay que dejarlos que suban en un sitio templado pero se puede hacer los mismo que antes, meter en el horno a 50ºc durante unos diez minutos.

Ya solo queda sacarlos, pincelar con huevo batido, colocarles un poco de azucar perlada (yo no la he conseguido encontrar asi que los espolvoreé con azucar normal) y meter en el horno a 200ºc durante unos veinte minutos o hasta que se vean dorados.


Aqui están unos deliciosos korvapuusti o bollitos de canela para chuparse los dedos.
Un apunte, para que se conserven tiernos y no se os pongan como piedras lo mejor es guardalos en una bolsa de plastico con una pinza.
Creo que me quedaron muy bien y sin nada que envidiar a los que tome alli, si alguien se anima con la receta...¡que comente!
¡Buen provecho!


viernes, 12 de septiembre de 2014

Finlandia, ardillas y otra fauna

Antes de poner el pie en Finlandia, y esto es literal ya que es en el avión donde te das cuenta, ves que la naturaleza esta "ahí mismo", justo debajo de ti. Naturaleza de verdad, de la que sale en las películas con sus lagos, sus bosques infinitos, arboles que tocan el cielo y demás.

Me encanta prepararme bien los viajes, buscar en internet, comprar varias guías, etc así que ya tenia una idea de las cosas que quería ver y una de ellas era Seurasaari.
Seurasaari es una isla a quince minutos escasos del centro de Helsinki, mas adelante publicare otra entrada con mas detenimiento pero me ha parecido que seria una forma amena de empezar el blog hablando de animalillos que a casi todo el mundo le gustan.

Pues bien, ya había leído que la gente cuando va a Seurasaari les da de comer a las ardillas asi que ni corta ni perezosa compre un paquetito de avellanas y lo metí en la maleta camino de Helsinki.
Pensaba que nada mas llegar y sacar el paquete, un montón de adorables animalitos peludos se me tirarían encima....pero no.
Empezamos a caminar por sitios como este


Y con vistas como esta



Por alli no se veia ninguna ardilla y estaba empezando a pensar que las avellanas me las tendria que comer yo, cuando doblamos un recodo y vimos a una correteando; saque rapidamente el paquete y me tire al suelo llamando a la ardilla como si fuera un perro y creyendo que vendria ( aqui se notan mis raices de ciudad ), como podeis imaginar la ardilla paso de mi, yo me desilusioné y el hombre de la casa empezó a decirme que con los animales habia que tener paciencia.

El siguiente paso fué dispersar algunas avellanas para que el animalillo las viera y, ¡por fin¡ se acerco y cogió una.
Una ardilla preciosa con una cola enorme, mullida y esponjosa y que movia su hociquillo mientras comia, aqui podeis ver a la interfecta.


Fue muy emocionante ver como volvía un par de veces a por mas, pero os aviso, no se os van a subir a la mano a comer, son mas bien timidas asi que armaros de paciencia. Yo no tuve mucha, lo reconozco.

Dejamos a las ardillas y seguimos avanzando, llegamos a una zona donde los arboles estaban cuajados de casitas para pajaros pero ninguno a la vista hasta que te acercas, fue poner un pie en ¨su¨ zona y llegaron a bandadas.

A mi me dan miedo los pajaros, si, es un miedo irracional pero es asi, puedo verlos de lejos y me parecen muy monos pero no me gusta que se acerquen, asi que cuando vi como se ponia la cosa me aleje y le di al hombre de la casa la bolsa de las avellanas, no contaba con que al sacar la bolsa uno de ellos se me pondria delante de la cara para que viera bien que estaba alli y que queria su desayuno; el grito que pegué del susto hizo que saliera volando, nunca mejor dicho.

Ni corto ni perezoso, se puso a darles de comer y estos desvergonzados se posaban en su mano.

Asi que ya veís, para las ardillas, paciencia, y para los pajaros...bueno, una buena bolsa de frutos secos y que os vean.

¡Un saludo a todos¡




Al principio.

Llevaba tiempo con la idea de crear un blog pero no llegaba a decidirme, varias preguntas me rondaban la cabeza, ¿Me leerá alguien? ¿De que podría escribir? ¿Escribire de forma adecuada?. Imagino que lo típico.

Como resulta que por esta situación ya tan nuestra de crisis tengo bastante tiempo libre y como también resulta que nadie me resolvía mis dudas sobre si escribir un blog o no, aquí estoy, dispuesta a contar cosillas sobre mis viajes, cosillas que en su día tuve que investigar mucho para tener una idea clara porque hay que ver la cantidad de información disponible que tenemos y la criba que se necesita para obtener lo que se busca.


En fin, solo me queda mencionar que la mayoría de fotos que se verán por aqui no las he he no yo, si no el hombre de la casa que siempre me acompaña cámara en ristre en todos nuestros viajes, aunque en un principio le de pereza y sea yo la que le arrastre.